Paul Newman Forever

Setembre 29, 2008

Hoy con el café de la mañana he leído en el periódico la noticia del fallecimiento del actor Paul Newman; hacía tiempo que yo esperaba la noticia, desde que en los diarios se recogió su precario ya estado de salud y desde su entorno más íntimo se pedía discreción y respeto sobre su vida. Qué se puede decir sobre él, que no digan  los más eruditos y conocedores de su obra y de su historia en los próximos días?. Apuntar quizás que Newman es el icono masculino de varias generaciones femeninas (me remito a mi madre) y que ha pasado en herencia a generaciones posteriores, porque, quién no prenda la mirada en su belleza masculina al revisar clásicos como La gata sobre el tejado de zinc caliente, o Dulce pájaro de juventud?. Como diría mi madre: Gregory Peck era arrebatadoramente atractivo, pero Newman era bello, ese calificativo que para alguno puede resultar ridículo, pero que es tan aceptable como cualquier otro.

Como director resulta tan interesante como actor, y una película que personalmente recomiendo de su escueta filmografía como maestro de ceremonias es El efecto de los rayos gamma sobre las margaritas, película que cuenta con una espléndida interpretación (criterio muy subjetivo de quien escribe) de Joanne Woodward, musa y compañera, para envidia de toda una generación de mujeres.

Newman fue un actor espléndido, discreto, inteligente y que supo retirarse a tiempo sin la decadencia descorazonadora de un Marlon Brandon, por ejemplo, o un Robert Redford. El cine sufre una enésima pérdida, que no será la última, por supuesto, pero que deja cierta tristeza en los amantes del cine. Queda de él una filmografía magnífica, un abanico de interpretaciones que superaba su fascinante mirada azul y su fisonomía seductora, y a nosotros, sus fieles y rendidos admiradores nos queda el recurso de revisar sus películas y solazarnos como lo hicieron nuestras madres en los cines de barrio, envidiando la suerte de la Woodward y la Taylor.

Qué viva el cine y gracias mil, Paul, por el placer que nos has procurado.

Rosa